A pesar de los riesgos para la salud, millones de nosotros siguen siendo fumadores. Además del cáncer, el fumar puede realmente afectar su salud dental también.
Además del tabaco puede hacer daño a su corazón y los pulmones, también puede tener un grave impacto en la salud de su situación dental. Los fumadores tienen seis veces más probabilidades de contraer la enfermedad de las encías que los que no fuman. Fumar no sólo daña los dientes, pero hace que la recuperación de cualquier tipo de procedimiento dental mucho más difícil.
Fumar mancha los dientes. Les resulta un color amarillento. El alquitrán de los cigarrillos también puede dejar manchas marrones en los dientes. Normalmente, la saliva en la boca ayuda a neutralizar el pH dentro de la boca. Esto permite que el daño causado por la placa con el esmalte de los dientes a corregir. Fumar hace que este proceso sea menos eficaz. Los fumadores son mucho más propensos a tener problemas con la placa. También son más propensos a desarrollar cálculo, que se produce cuando la placa se endurece en la superficie de los dientes. Esto hace que la caries dental para comenzar.
El consumo de tabaco también puede limitar la cantidad de sangre puede llegar a los tejidos de las encías. Esto tiene un efecto perjudicial sobre los huesos y otras estructuras de la boca. También causa daño a los tejidos de las encías. Esto hará que las encías se inflamen. Ellos comenzarán a separarse de los dientes. Esto, combinado con el daño a los huesos, a menudo hará que los dientes se caigan. Si los dientes no se caen, a menudo tienen que ser sacado por el dolor o infección. Los fumadores pierden sus dientes con mucha más frecuencia que los no fumadores. Los hombres que fuman pierden casi tres dientes cada diez años. Promedio, las mujeres la pérdida de uno y los dientes medio cada diez años.
Los fumadores tienen mucho más problemas dentales que los no fumadores. Por desgracia, también es más difícil de tratar fumadores para sus problemas dentales. Fumar es sumamente desalentador después del trabajo dental o la cirugía oral. Algunos dentistas no funcionarán en un paciente que no creen que se abstengan de fumar antes y después del procedimiento. Los fumadores tienen un riesgo alto de desarrollar alveolitis seca después de la cirugía dental. También tienen un tiempo de curación mucho más difícil de la cirugía dental. Los procedimientos como implantes dentales a menudo no se recomiendan para los fumadores debido al daño continuo que fumar va a hacer, incluso después de que se colocan los implantes.
La buena noticia es que si un fumador deja de fumar, la salud de sus encías puede aumentar en un año. No serán capaces de reparar el daño que se ha hecho, pero una vez que deje de fumar, sus dientes serán capaces de soportar mucho más tiempo. Ellos pueden recibir el tratamiento que puede ayudar a reparar el daño a los dientes y prevenir daños futuros. Los fumadores que dejan de fumar pueden salvar sus dientes antes de que sea demasiado tarde.
